viernes, 30 de abril de 2010

Cuando vi música


Cuando era pequeña fui a una sala de conciertos muy especial que hay en Barcelona. Podríamos decir que, con total certeza, no existe en el mundo una sala similar. Estoy hablando por supuesto del Palau de la Música. Quien lo haya visitado alguna vez, no lo olvida nunca; no sólo por la acústica que tiene, sino también por ornamentación hecha a mano que viste este espectacular homenaje a la música en general. Digamos que fue mi primera visita a dicho lugar mágico, pero también fue la primera vez que oí Jazz.