Cuando vi música

Cuando era pequeña fui a una sala de conciertos muy especial que hay en Barcelona. Podríamos decir que, con total certeza, no existe en el mundo una sala similar. Estoy hablando por supuesto del Palau de la Música. Quien lo haya visitado alguna vez, no lo olvida nunca; no sólo por la acústica que tiene, sino también por ornamentación hecha a mano que viste este espectacular homenaje a la música en general. Digamos que fue mi primera visita a dicho lugar mágico, pero también fue la primera vez que oí Jazz. 

La combinación de las dos cosas fue bastante alucinante. Jazz, un género que ha vivido mejores tiempos, y del cuál han surgido un sinfín de estilos distintos. Y cuando hablamos de Jazz no podemos dejar de hablar de Nueva Orleans, la ciudad que engendró el género. Cuando pensamos en Nueva Orleans a todos nos viene a la mente imágenes vistas tiempo atrás. Cuando intentamos definirla podríamos decir un montón de palabras sueltas que podrían encajar, como piezas de un puzzle, en esta gran imagen que es Nueva Orleans. Podríamos hablar de vampiros, como lo hacía Anne Rice cuando creaba a Lestat; de fiestas en la calle, de turismo, de bourboun, de música en directo, de vudú, de carnavales o de alta cocina. Por desgracia, todo esto seguiría siendo cierto  si no se hubiera cruzado con cierta señora de malos modales llamada Katrina de apellido huracán, que arrasó en 2005 esta ciudad de Luisiana (mientras el presidente George W. Bush estaba  de vacaciones, no lo olvidemos). El bourboun se acabó, el turismo se fue y el jazz desapareció. Nueva Orleans quedó borrado de la faz de la tierra.

Ahora, 5 años después, podemos ver qué significó el mayor desastre natural de la historia de Estados Unidos. De esto mismo es de lo que trata Treme. De cómo fueron esos días post-Katrina para los ciudadanos de Nueva Orleans. Hablar de los personajes no es importante porque todos forman parte del mosaico que es Treme, todos miran desde perspectivas diferentes una misma catástrofe mientras intentan reconstruir sus vidas. Estamos ante una serie que sólo ha emitido 3 capítulos pero os puedo decir que será una joya. Un rara avis entre las series como lo han sido Six feet under, Los Soprano o The Wire. Precisamente son los guionistas de ésta última los que se esconden detrás de Treme. Además tiene la mejor música de la historia de las series. Por que si hay de algo de lo que debamos hablar cuando hablamos de Nueva Orleans, es de Jazz. No os preocupéis, no es un musical. Es una serie con una banda sonora de película.
Por cierto, se me olvidaba, Elvis Costello se interpreta a sí mismo.