Ésta es un liga muy extraña. Extraña en el sentido que parece ser que son los entrenadores los que ganan partidos. Extraña porque se habla de todo menos de fútbol. Que a fin de cuentas es lo que nos gusta. Ahora ya no eres del Barça o del Madrid, ahora eres de Mou o de Pep.
El Barça juega como los ángeles. Pero eso no importa; importa buscar excusas al mal juego o al porqué eres tan inferior al eterno rival. Entonar el mea culpa no da portadas pero en cambio acusar de ligas adulteras, arbitrajes, calendarios, dopajes y rivales que se venden antes de salir al campo, sí. Lo peor, es que la gente se lo cree. Ya lo dijo Mascherano (grande el Jefecito): "le Barça siempre gana por los árbitros no porque ha chutado 19 veces al arco y ha dado más de 800 toques", ya un poco harto, como muchos culés, de que se les quiten méritos a una temporada espectacular. Pero las victorias del Barça en según que medios, se reduce a un cuadrado inferior izquierdo, en letra pequeña y que no se vea.
Existe un cuento infantil, que me repetían mucho de pequeña, sobre un pato que siempre decía que venía el lobo y siempre era mentira. Hasta que un día llegó el lobo y nadie le creyó. Lo que quiero decir es que a veces de tanto repertir las cosas, acabas perdiendo toda la credibilidad. Algo así le ha pasado a José "Hoy, mañana y siempre con el Barça en el corazón" Mourinho. Y es que a Mou ahora le molestan los calendarios. Bueno ahora no, en Italia le molestaban y en Inglaterra también. Y es que éste hombre no está contento con nada.
Hoy los calendarios, mañana quizás será la alineación de Marte con la Tierra.
En Can Barça estamos tranquilos, porque parece que cuánto menos se habla de fútbol y más de manos negras, más motivados están los jugadores. Abril será un mes intenso... y ojalá sea orgásmico.